Tuesday 4 de April de 2006, 00:00:00

19 de Marzo del 2006, hace algo más de un año una excursión por esta misma zona fue mi primer contacto con gente de Madteam. De entonces aquí ha sido un no parar de recorrer cimas y disfrutar de la montaña en compañía. Dificultades de horarios han ido impidiendo que las mismas personas celebráramos aquel primer contacto repitiendo la misma excursión. Esta subida a Noufonts es lo más cercano a esa celebración que finalmente no pudimos realizar, la mayoría de integrantes del grupo esta vez son otros pero igualmente ha resultado una excursión en excelente compañía. Hay una galeria de fotos en http://jordic.madteam.net/blog001387/galeria_1929/

[+] click para ampliar Jordi subiendo entre la niebla

[+] click para ampliar Aretha llegando a la cima

[+] click para ampliar El grupito ya en la cima

[+] click para ampliar El viento nos está congelando

[+] click para ampliar En la segunda cima

Según el calendario nos encontramos ante el fin de semana que precede a la primavera,  la montaña parece no haberse enterado y nos reserva un domingo aún completamente invernal. Durante la semana se había barajado la posibilidad de hacer la circular Nuria-Noucreus-Noufonts-Nuria para celebrar el ya más de un año de nuestro primer encuentro. En aquel entonces fue una excursión organizada por Zodiaco, que dio lugar a que cuatro participantes de Madteam nos conociésemos. Hacia ya algunos meses que nos rondaba la idea de celebrarlo, pero las dificultades de coincidencia lo han ido impidiendo. De nuevo esta vez los planes se tuercen y la conmemoración se anula, pero nos han quedado ganas de ir a esta zona y finalmente es con otro grupito que decidimos realizar la excursión, esta vez los integrantes somos Aretha, Waldo, Jam, Montse, Jordi C y yo. Eowyn está enferma y no podrá venir. La Brushy se quedará en la furgona, la nieve sabemos que estará pastosa y será lo mejor para todos.

Hemos quedado en el aparcamiento de Queralps a las 7:30 para coger el primer cremallera, el de las 7:44. Jam y Montse dormirán por la zona, Jordi y yo nos montamos un "vivac" en el aparcamiento, dormiremos en la furgona y por la mañana les llamaremos por móvil para decirles como vemos el tiempo, si sigue lloviendo quedaremos en Campdevanol y subiremos al Costa Pubilla, un pico bastante más bajito que nos servirá como plan B.

La mañana del domingo amanece nubladota pero la lluvia nocturna parece haber cesado. Las montañas más bajitas se nos muestran espolvoreadas por la nieve reciente. Mientras dudamos entre si vale o no la pena coger el cremallera para subir a Nuria suena el teléfono, es Waldo, al parecer van con algo de retraso y no están seguros de llegar a tiempo para el tren. Jam y Montse llegan pronto y vamos equipándonos, seguimos con las dudas del destino de nuestros pasos. Durante la espera coincidimos con Zodiaco y los integrantes de su excursión al Puigmal. Mientras conversamos llegan Aretha y Waldo, quedan apenas cinco minutos para que llegue el cremallera, rápidamente se calzan las botas cargan mochilas, palos, crampones, piolos, raquetas y demás material y cerrando el coche oímos ya el silbato del cremallera acercándose a la estación. Nos despedimos precipitadamente de Zodiaco y su grupo y pies para que te quiero salimos los seis corriendo escaleras arriba, llegamos con el tren ya en la estación,  mientras subimos Jam se encarga de coger los billetes. Es el último en subir, una vez arriba se cierran las puertas y partimos rumbo a Nuria, nuestro primer destino de hoy. Entre risas y sofocos nos sentamos y nos damos cuenta de que con las prisas hemos subido en el cremallera sin saber seguro si queríamos o no subir, arrrgggggg, hemos salido tan rápido que no nos hemos acordado de valorar que excursión preferíamos, bueno... a lo hecho pecho, ahora ya vamos camino de Nuria, veremos que haremos una vez allí.

 Durante el trayecto aprovechamos para acabar de equiparnos, nos ponernos las polainas y empezamos las practicas con los arvas, llevamos tres, el de Waldo, Jam y Montse. Waldo además lleva sonda y pala. La primera clase consiste en ponérselo correctamente con las correas. Waldo es un alumno aventajado y pronto termina el examen, con Jam y Montse... nos reímos un poquito más, pero finalmente aprueban también. La siguiente clase consiste en ver si los arvas se encuentran unos a otros, si tan cerca ya no funcionan... Esta prueba la superamos también con buena nota y entre risas y bromas casi sin darnos cuenta llegamos a Nuria.

Al bajar del cremallera comprobamos que los cristales no estaban realmente empañados, es la niebla que nos deja la visibilidad bastante reducida. Observando que la nevada de ayer ha acumulado más de diez centímetros de nieve nueva, me alegro de haber dejado a la Brush descansando en la furgona. Nos quedamos en la estación, hay dudas, no sabemos si coger el siguiente cremallera que dentro de 10 minutos baja de nuevo a Queralps e irnos al Costa Pubilla o bien continuar con la excursión planeada aunque no consigamos llegar a ningún pico. La nueva pantalla que han instalado en la estación nos indica que el riesgo de aludes está en grado 2 y que la velocidad del viento es nula. Democráticamente planteamos un referéndum con las dos opciones. En un principio parece ganar la alternativa de bajar a Queralps, pero un pequeño claro que se abre en el cielo nos permite comprobar que el espesor de la niebla es pequeño y el cambio de varios de los votos en blanco acaban decidiéndonos por intentar el pico. Como ajuste de ruta, viendo las escasas posibilidades de que lleguemos a poder hacer una circular, decidimos ir directamente al coll de Noufonts, si conseguimos llegar al collado nos plantearemos seguir hasta el pico y luego por donde volver.

Tomamos primero un café en el bar y casi a las nueve emprendemos la marcha. El estado de la nieve nos aconseja partir ya con las raquetas puestas. Se nos une al grupo un perro grandote que suponemos debe vivir aquí. La niebla en principio es alta y podemos ver bien el camino, cruzamos la zona de pistas de esquí y atravesamos el trocito de bosque en busca del fondo del valle que hemos de reseguir hasta llegar al collado. No pasa ni media hora que la niebla desciende y en segundos nos deja inmersos en tinieblas. Si nos distanciamos mucho llegamos a perdernos visualmente pero la nieve está pastosa y las trazas que dejamos con las raquetas no tienen perdida. Por seguridad preferimos ir algo separados y procuramos alternarnos entre los que llevan arva y los que no. Aun con tan poca visibilidad el recorrido de momento es evidente,  debemos seguir el curso del valle por la parte más baja sin ascender por ninguna de las laderas. Conocemos el camino y sabemos que en breve hemos de encontrar el poste indicador del desvío de sendas entre la que lleva a Noucreus y la nuestra que nos dirigirá a Noufonts. En algunos momentos notamos un resol que parece anunciar mejoría en el estado del cielo, pero la niebla se empeña en mantenerse cerrada, solo durante unos segundos se abre un poco, lo justo para dejarnos localizar el poste indicativo y como si de un juego se tratara... vuelve a cerrarse. Estos segundos de visión nos permiten reorientarnos y alcanzar el indicador sin dificultad. Son las 9:45h. El poste está prácticamente todo él cubierto por la nieve, solo asoma la parte alta con los indicadores de las sendas, conocemos su altura en verano cuando está libre de nieve y verlo tan cubierto nos hace apreciar el paquetón de nieve que tenemos bajo nuestros pies, este no nos preocupa, pero si el de las laderas del  nuevo valle por el que nos internaremos ahora. Foto de rigor junto al palito y continuamos procurando mantenernos distanciados y en silencio. La ausencia de viento contribuye a que aún sin haber sol la sensación de frío sea escasa Conforme ascendemos por el valle parece de nuevo notarse una claridad que anuncia un nuevo intento de despejar. Siguiendo con el juego la niebla de nuevo se abre y nos permite localizar el collado de Noufonts. Algunas fotos aprovechando esta claridad que esta vez dura algo más... y de nuevo a las tinieblas.

A medida que nos acercamos al fondo del valle la pendiente comienza a acentuarse, la subida final al collado sabemos que es bastante empinada así que cuando notamos que las raquetas empiezan a perder agarre las cambiamos por los crampones. Ya calzados, piolo en mano, continuamos ascendiendo ahora algo indecisos en la orientación, no vemos el collado, unos lo situamos más a la izquierda y otros más a la derecha pasando por un terreno más pedregoso. Por uno u otro recorrido todos acabamos alcanzando este primer objetivo. Son las 12:15h. La ladera norte está venteada y muestra trozos de hierba helada. La ladera sur por la que hemos llegado, está recorrida por una alta cornisa de nieve que nos protege del fuerte viento que se deja notar ya a esta altura. En este punto decidimos hacer una paradita para comer. Mientras, realizamos otra votación para determinar nuestro próximo objetivo. Aretha tiene dudas porque ha olvidado el piolet y no sabe si intentar la cima sin él o quedarse esperándonos en el collado. Con este mal día no estamos dispuestos a dejar a nadie aquí solo esperando, o subimos todos o nos damos todos la vuelta. Conocemos la ruta de subida al pico, es una ladera poco expuesta y Jam decide dejarle a Aretha su piolo, él subirá ayudándose con los bastones. Finalmente decidimos continuar con el ascenso. Son las 12:40, seguimos con los crampones puestos y pertrechados con ropa de abrigo, cámaras de fotos, piolo y bastones, remprendemos la marcha dejando las mochilas en el collado para subir y bajar más rápidos. Según el plano y el gps nos quedan pocos metros de desnivel. A partir de aquí nos acompañará el fuerte ventachón acumulándonos escarcha en el costado de barlovento. Al poco rato nuestros cabellos comienzan a quedar tiesos y blancos dejándonos un aspecto gracioso.

En los últimos metros que nos separan de la cima, como si de un premio a nuestro tesón se tratara, la niebla se abre y el sol nos ilumina gran parte de las crestas que nos rodean. No llegan a despejarse todas pero por unos minutos el día queda radiante y el paisaje nos sorprende. Subiendo inmersos en la niebla habíamos olvidado lo bonitas que debían ser las vistas desde aquí arriba. La niebla se ha abierto en pocos segundos y en esa escasa fracción de tiempo hemos pasado de la nada al encanto, de la resignación a la exaltación. Recorremos este último tramo hasta la cima bromeando y fotografiando todo lo que nos rodea sabedores de que este regalo durará poco. Son las 13:30h. Llegados a la cima nos turnamos para la foto de rigor, pues todos queremos inmortalizar al grupo con nuestra propia cámara. Disfrutamos de las vistas, intentamos reconocer algunas cimas y poco después, como si ya hubiésemos tenido bastante... la niebla se cierra de nuevo para ya no volver a abrirse en lo que queda del día. Poco más apetece estar en la cima, apenas hemos estado 10 minutos que ya emprendemos el regreso al collado. En este punto recogemos las mochilas y descartamos la opción de volver por Noucreus, para no ver nada preferimos dejar la ruta circular y regresar a Nuria por el mismo recorrido de subida.

Retrocedemos sobre nuestra propia traza y sin incidentes llegamos a Nuria cuando faltan apenas cinco minutos para que salga el cremallera de las cuatro de la tarde. En poco rato nos encontramos de nuevo en Queralps, descargando los trastos en los coches tras casi nueve horas desde que salimos corriendo de este mismo punto. Cafetito de despedida en Ribes... y para casa.

Ha resultado una excursión curiosa, no hemos visto casi nada, pero lo poco que hemos visto nos ha llenado mucho, casi en primavera pero con unas condiciones que han resultado de lo más invernales. Un día que poco invitaba a salir a la montaña, pero que finalmente nos ha permitido disfrutar de ella. Hace algo más de un año cuando en aquella primera excursión también estuvimos por esta zona, tuvimos también niebla, viento y frío. De aquel entonces lo que más recuerdo es lo mucho que me llegué a reír y el frío espantoso que pasé. Desde entonces a aquí... ha "llovido" mucho.